Prometeo encadenado

  

   El próximo jueves 15 de abril acudiremos al Palacio de Festivales a disfrutar una tragedia griega compuesta hace unos 2.500 años:  Prometeo encadenado, de Esquilo. La representan estudiantes de Cádiz que se preparan para ello durante todo el año y recorren España escenificándola. Supongo que ya la estáis leyendo, pero de todos modos os resumo su argumento: describe cómo el titán es llevado por Fuerza (Κράτος), Violencia (Βία) y Hefesto a la cima de un monte, donde permanecerá encadenado por haber robado el fuego a los dioses entregándoselo a los hombres.

   Zeus aparece como un dios injusto. Pero es que el benefactor de la humanidad, ¡se atrevió a desafiar a los dioses! Ante Prometeo encadenado desfila un coro de Oceánides que ha acudido a tratar de consolarle. Después llega Océano,  y por último Ío, enloquecida por el amor de Zeus y los celos de Hera. A ella le cuenta el titán que él sabe, por sus habilidades premonitorias, que al final será liberado por Hércules.

Zeus quiere enterarse de esta profecía y para ello enviará a Hermes. Sin embargo, Prometeo dice que prefiere ser desgraciado a ser un siervo de Zeus como es él. Pero Hermes le amenaza con que Zeus  hará que la cumbre de la montaña bajo la que está caiga encima de él y más tarde un águila le devorará todos los días su hígado inmortal, que se renovará por la noche. Prometeo dice que cederá y que todo eso que le anuncia ya lo sabía. Comienza la tempestad anunciada por Zeus. 

 

   La obra formaba parte de una trilogía, pero desgraciadamente hemos perdido las otras dos: Prometeo liberado y Prometeo portador del fuego.







   Ilustraciones: Prometeo (Moreau), Prometeo trayendo el fuego (Cossiers) y Atlas y Prometeo (S. VI a. C.)